Panorama del acero y del hierro 2017
No es un misterio que este año 2017 es un año de muchos cambios y desafíos, tanto a nivel regional como a nivel internacional. Las economías mundiales están viviendo dispares situaciones: EE.UU está entrando en una nueva etapa, plagada de incertidumbre y donde la clara señal de la administración Trump es dar un giro hacia el proteccionismo comercial, algo que en tiempos de mercados globalizados y altamente conectados parece ser una medida absolutamente extemporánea. Sin embargo, aún está por verse si internamente el país logra generar una alta utilización de acero y mineral de hierro, empujados principalmente por millonarias inversiones en infraestructura y construcción. Por otro lado, la situación actual de China, su reestructuración e intento de consolidación dentro de la economía mundial también parece ser un asunto que marcará 2017. Debido a la ralentización de la economía china, y en particular lo referente a la producción y exportación de acero al resto del mundo, se espera que durante 2017 sea India, el eterno candidato, quien tome un rol más protagónico en la industria. Por su parte Colombia, también está llamada a seguir y mejorar la senda que han hecho que poco a poco su economía y su industria del acero se sigan consolidando a través del tiempo dentro de la región.
A nivel general, el mercado del acero en 2017 enfrentará desafíos en la reestructuración de la industria mediante fusiones, cierre de molinos por temas medioambientales y niveles de estímulo. En cuanto a los precios del acero, estos se dispararon durante 2016 después de que el récord de préstamos chinos mejoró los mercados, y en 2017 los mismos temas seguirán presentes. La sobrecapacidad seguirá también presente en la industria a pesar del gasto en infraestructura. Al respecto, la administración Trump ha prometido un enorme gasto en este ítem, pero los niveles actuales y el tiempo serán claves para la demanda de acero. Estos planes ofrecen múltiples caminos para el acero en 2017 y años posteriores, ya que los planes de gasto en infraestructura tendrían impacto en el sector construcción y productos largos de acero.
En relación con los activos del grupo de productores mundiales de acero, estos han tenido un mejor desempeño que el Índice S&P 500. Los productores de acero que cotizan en esta bolsa estadounidense se han beneficiado de los cerca de USD46 por tonelada de aumento promedio del precio del acero en 2016.
En resumen, 2017 será un año que dependerá fuertemente de lo que pueda hacer China tanto a nivel interno como externo en términos de la industria del acero y de la importación del mineral de hierro o uso de chatarra. A nivel interno, el desafío será recortar la producción y comenzar a dar un giro hacia condiciones de producción de mayor calidad que incluyan tanto mejoras en las condiciones laborales, así como también en la tecnología de producción y una mayor preocupación por el tema medioambiental. A nivel externo, el creciente proteccionismo y la búsqueda de bloquear las importaciones chinas supone un enorme desafío para todos aquellos que dependen fuertemente del acero en términos de su comercialización en sus mercados domésticos, al igual que los productores de dichos mercados domésticos que buscarán defender su posición en pos de tener una competencia más justa.
Artículo originalmente publicado en Infoacero