Recesión económica afecta al sector de la construcción
La proyección del crecimiento en el sector de la construcción es de 4,2% para este año, según Fedesarrollo permanece sin cambios respecto a la revisión de prospectiva de noviembre.
El informe publicado por Fedesarrollo, “la perspectiva económica”, dice que, “tras varios meses de balances negativos, aunque con tendencia al alza, en enero de este año el Índice de Confianza Industrial (ICI), volvió al terreno positivo, consolidando el proceso de recuperación industrial. Dicho comportamiento va en línea con los datos de la muestra mensual manufacturera del DANE que mostraron una recuperación hacia finales del año pasado.”
Para analizar dicho índice de confianza, este se conforma por tres componentes: el volumen actual de precios, el nivel de exigencias y las expectativas de producción para los próximos meses.
El subsector de edificaciones se verá favorecido por las políticas del gobierno de vivienda gratuita, subsidios a las viviendas de interés social (VIS) y los subsidios a la tasa de interés, con lo cual registrará un crecimiento de 2% para 2017.
Por otro lado, el subsector de obras civiles crecería a una tasa de 5,8%, impulsado por proyectos de obras públicas de los entes territoriales, la recuperación prevista en la inversión de Ecopetrol y de otras empresas del sector minero energético, la construcción de aeropuertos, y la mayor ejecución en las obras de cuarta generación, que a pesar de los problemas en las negociaciones con las comunidades y con los contratistas de algunos proyectos, este año tendrán un mayor dinamismo.
Sin embargo, cabe resaltar que existen riesgos latentes para este sector por los problemas que enfrentan las concesiones por las investigaciones que se adelantan a Odebrecht, ya que podría generar inconvenientes en los cierres financieros de otros proyectos.
A pesar de lo expuesto en el informe por Fedesarrollo, las cifras presentadas por el DANE han mostrado que la economía colombiana ha entrado en una situación de recesión. La mayoría de las actividades económicas del país se situaron negativamente; esto por un precario rendimiento en el sector energético, la exploración de minas y canteras, y el balance negativo del sector de la construcción; adicionalmente se suma el sector de comercio. Estos tres sectores se ubicaron por debajo del -2%.
Esta desaceleración económica con respecto al año pasado ha sido marcada teniendo en cuenta que el crecimiento del primer trimestre del 2017 estuvo por debajo de las expectativas como del presentado el año pasado; incluso, varios analistas afirman que esta desaceleración puede seguirse presentando.
Por consiguiente, el sector financiero ha venido afrontando desafíos, porque se ha incrementado la cartera vencida de la banca colombiana, hasta hace un mes asciende a un total de 16 billones de pesos, es decir, a un máximo de 4,2% en comparación del mismo periodo del año pasado.
El deterioro que se ha mostrado forma parte de la respuesta de los consumidores frente a la desaceleración de la economía. Los niveles de cartera vencida están todavía lejos del pico de la última década que fue del 5%, lo que muestra que todavía hay solidez financiera. Aun así, la Superintendencia sigue al detalle del comportamiento de todos los indicadores del sector, ha señalado Jorge Castaño, superintendente financiero, a los diferentes medios.
El tema que preocupa al sistema financiero es la exposición que ha asumido en los proyectos viales y de infraestructura. Este año se debió desembolsar $7 billones a las obras, sin embargo hasta hace algunos meses apenas supera los $600.000 millones, según fuente en Dinero.
De esta manera, el sector de la construcción y la banca deben buscar la manera de desarrollar las obras para que haya facilidades con garantías suficientes de acceder a los créditos para los proyectos. De tal modo que la banca debe esforzarse por comprender el negocio de la ingeniería, como los constructores deben tener en cuenta toda la información que requiere la banca para quedar tranquila con los créditos que otorga; y economistas han alertado un riesgo de recesión y han incitado al Banco de la República a acelerar la baja de las tasas de interés.
Sin embargo, el presidente de la Cámara Colombiana del Acero, Oscar Ramírez, expresó durante el almuerzo sectorial de aceros largos del mes pasado, que “las empresas se quiebran por la caja, más que por otra cosa, así que hay que cuidarla en especial en este momento en donde se empieza a reflejar cierta morosidad por parte del sector construcción.”
Aquí algunos consejos para tratar la morosidad:
- Analice el historial crediticio del cliente, para evaluar las condiciones de cada cliente y determinar las estrategias más adecuadas para cobrar.
- Mantenga el historial a la mano, ya sea mediante controles manuales hechos en hojas de cálculo, o a través de un software, siempre es bueno revisar la historia de sus clientes para diferenciar al que siempre paga correctamente de los malos pagadores.
- Darle valor a los buenos pagadores, se puede servir como un estímulo para que hagan pagos con descuentos u otras formas más flexibles de recuperación.
- Implementa un sistema de facturación eficaz que alerte de la falta de pago en el primer día de retraso, para tener la oportunidad de hacer un recordatorio, siempre siendo amable y ético.
- Nunca venda sin factura porque vender sin factura es ilegal. Segundo, porque, sin factura, la empresa no tiene amparo para enfrentar judicialmente al moroso.
- Mantenga sus finanzas ordenadas, en muchos casos, el desorden del flujo de caja hace que las deudas de un cliente se mantengan “ocultas” por algún tiempo. Esta situación puede causar un gran problema a su empresa, que descubre el asunto cuando ya hay una gran pérdida financiera.
Y para prevenir la morosidad, no olvide lo siguiente:
- Aproveche la tecnología usando un sistema automatizado que registre la facturación y dé seguimiento a la cobranza.
- Instruya a sus cobradores para que conozcan bien el estado de la cartera, motívelos con buenos incentivos y reconozca la importancia de su papel para la empresa.
- Ofrezca esquemas de reestructuración a clientes valiosos, pero tenga cuidado de no entregar el comprobante de la deuda total, sino solo extender un recibo en el que se manifieste el abono y el saldo pendiente.
- Recurra a un servicio de cobranza especializado si no cuenta con la infraestructura y el personal que se necesita para cobrar facturas vencidas.
Pese a existir aspectos favorables al crecimiento, como las mejores condiciones climatológicas, el incremento en los precios de materias primas, y la menor incertidumbre por la aprobación de la reforma tributaria y del acuerdo de paz, siguen existiendo riesgos a la baja.
Entre los riesgos externos se destaca la incertidumbre global, pero especialmente lo alusivo a la política monetaria y comercial de Estados Unidos, además de la recesión en varios de los principales socios comerciales de Colombia, en particular Venezuela y Ecuador.
Artículo originalmente publicado en INFOACERO