5 formas de recuperar a clientes perdidos
A nadie le gusta perder un cliente, pero esas cosas pasan, todos los días, además. No hay que flagelarse en exceso, simplemente se trata de tomar las riendas de tu negocio, analizar el problema e intentar solventarlo. Te acercamos 5 formas de recuperar a clientes perdidos. 5 pasos que puedes hacer fácilmente y que te ayudarán a recuperar a ese cliente que se fue.
Busca siempre los errores con humildad
No creamos que somos perfectos. Si el cliente se ha ido es que algo no estamos haciendo bien. Para poder conseguir que regrese será importantísimo hacer una revisión, observar en qué hemos fallado. Todo lo que se identifique como una molestia para tu cliente, debe ser corregido al instante, o por lo menos, revisado. Sí, es cierto que el cliente no tiene siempre la razón. No obstante, si un cliente se va (y sobre todo si son varios), no está de más revisar desde nuestras políticas de trabajo hasta nuestros productos.
Identifica y estudia al cliente
Para poder recuperar a tu cliente, no te queda otra que estudiarlo bien. Investiga qué tipo de cliente se fue. Sólo sabiendo cómo es, el producto o servicio que usaba y la manera en la que lo estabas atendiendo, lograrás ver qué es lo que has hecho mal y cómo actuar en consecuencia. Una vez investigues entenderás cómo mejorar tu producto y volvérselo a ofrecer con mayor calidad y eficiencia.
Realiza una llamada
Una de las formas con las que contamos para recuperar a nuestros clientes es el teléfono. Es una estrategia adecuada si no quieres visitarlo o ves escasas posibilidades de éxito en esa visita. Uno de los inconvenientes de las llamadas es que muchos las consideran una intromisión. Prepara bien el guion, entiende y anota qué quieres decir exactamente. Se humilde en la llamada, recuerda que eres tú el que quiere que vuelva, no él.
Lo bueno de las llamadas es que tienen una rápida respuesta y que tiene una interacción en tiempo real. No obstante, intenta que esa llamada no se haga eterna.
Contactar con tu cliente por email
Otra de las opciones es contactar con nuestro antiguo cliente por email. Permite una gran rapidez en la comunicación, aunque la interactuación es menor que en el caso de la llamada.
Capta la atención de tu cliente con un email llamativo, que no termine en la papelera antes de ser abierto. Además, recuerda que el mail es flexible en tamaño, por lo que podrás explayarte mucho, eso sí, como en la llamada, intenta que no se haga eterno.
En general, intenta ofrecer una disculpa, ofrecer algo extra a su vuelta y asegurar que habéis estado trabajando en mejorar los servicios para que el cliente, es decir, él, esté contento al 100%.
Extiende esta actitud en el tiempo
La mejor defensa es un buen ataque. Si soluciones el problema de forma temporal no haremos nada. Lo mejor es que esta revisión de tus servicios te ayude a mejorar tu empresa y tu política de trabajo. Además, esto también te puede ayudar a revisar otras áreas de tu empresa para cerciorarte de que todo funciona como debe funcionar.
En este punto, la comunicación interna entre la parte de gestión y los trabajadores es esencial. Habla con tu plantilla y expón ciertos cambios y mejoras. Asegúrate de informar bien y de explicar cómo quieres que se hagan las cosas a partir de este momento. No olvides que tus operarios son, en cierto modo, la imagen de tu propia empresa.